Ni “partía, ni doblá”, Magdalena Álvarez llegó a Sevilla medio afónica. Apuró al máximo el botellín de agua mineral Lanjarón, y hasta sacó de su bolso, con misterio, un “kleenex”, como avisó justo antes de exhibir un pañuelo blanco. Acompañada de José Salgueiro, expresidente ...